Está semana el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha admitido que su experimento con Bitcoin no ha salido exactamente como lo había planeado. El mandatario centroamericano ha luchado contra las críticas por su postura abierta a las criptomonedas y por ser un defensor energético de Bitcoin. 

En una entrevista con la revista TIME, que fue publicada el jueves pasado, ha reconocido los inconvenientes para que las personas de su pequeño país usen las criptomonedas, en especial Bitcoin, como método de pago. 

“Bitcoin no ha tenido la adopción generalizada que esperábamos”, afirmó el gobernante. Recordemos que en 2021 se anunció que Bitcoin, la principal cripto del mercado, pasaría a ser moneda de curso legal, junto con el dólar estadounidense. La aplicación de esta política monetaria implicaba que las empresas deben aceptar la criptomoneda si cuentan con los medios tecnológicos para hacerlo. Sin embargo, eso no ha sido posible y el desarrollo ha sido muy poco. 

En un afán por fortalecer está medida, el excéntrico líder, un favorito de la derecha estadounidense y libertaria, también comenzó a comprar la criptomoneda para colocarla en el balance del gobierno. Pero la realidad es que un porcentaje mayoritario de negocios aún no la aceptan, solo algunas grandes franquicias como McDonald's se han sumergido completamente. 

Hasta ahora el salvadoreño común se muestra bastante indiferente a la “compleja tecnología”. A las críticas internas se les une las del FMI y la de algunos políticos estadounidenses. A pesar de esto, el presidente Bukele no se rinde en su intento por establecer a Bitcoin como una moneda fuerte en El Salvador. 

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Bukele esperaba una mayor recepción en la adopción de Bitcoin

La política gubernamental también ha consistido en comprar Bitcoin para incluirlo como activo en las reservas nacionales. Hasta la fecha El Salvador posee 5.857,76 BTC por un valor de 348.202.738 dólares, según datos publicados por el propio gobierno. 

Para el este líder político moderno es importante salvaguardar el patrimonio de los salvadoreños, es por ello que pensó en Bitcoin como mecanismo de ahorro. Cuando comenzó la aplicación de esta medida gubernamental, se le otorgaron 30 dólares en Bitcoin a cada ciudadano salvadoreño

Si [los salvadoreños] lo usan ahora, probablemente obtendrán beneficios en el futuro. Si no quieren usarlo, este es un país libre. Esperaba una mayor adopción, sin duda, pero siempre nos enorgullecimos de ser un país libre, libre en todos los sentidos.

Declaraciones de Nayib Bukele, presidente de El Salvador, en una entrevista para la revista TIME.

A pesar de las malas apreciaciones y que “el experimento podría haber resultado mejor”, el presidente Salvadoreño sostiene que “aún hay tiempo para hacer algunas mejoras” y que todavía no hay un “resultado negativo” en la aplicación de la política. 

Hay que dejar claro que el presidente centroamericano sigue gozando de una enorme popularidad en su país por otras políticas. Quizás por ello los fallos en otras políticas como su postura cripto podría verse como un revés menor en una gestión considerada como buena entre sus ciudadanos.