Lo más relevante:

  • Caroline Ellison, exdirectora ejecutiva de Alameda Research, ha sido trasladada de una prisión federal a un régimen de confinamiento comunitario tras cumplir una parte significativa de su condena. La cual está vinculada a su participación en los eventos que condujeron al colapso del exchange FTX.
  • Los fiscales federales acreditaron formalmente la extensa cooperación de Ellison con las autoridades durante la investigación, lo que fue un factor determinante para la reducción sustancial de su sentencia original. Este desarrollo contrasta marcadamente con la situación de Sam Bankman-Fried, fundador de FTX, quien permanece encarcelado a la espera de la conclusión de su propio proceso legal.
  • Mientras tanto, el proceso de bancarrota de FTX continúa avanzando, con los acreedores de la plataforma recibiendo pagos parciales. Hasta la fecha, superan los 16 mil millones de dólares en distribuciones. Un esfuerzo dirigido a mitigar las pérdidas de los clientes afectados por el colapso.

Caroline Ellison, corresponsable del colapso de FTX, es trasladada a confinamiento comunitario

Caroline Ellison, la exdirectora ejecutiva de Alameda Research, ha sido transferida de la custodia en una prisión federal a un régimen de confinamiento comunitario. Este cambio de estatus legal se produce después de que Ellison cumpliera aproximadamente 11 meses de su condena original de dos años, impuesta tras las investigaciones por la quiebra sistémica del exchange de criptomonedas FTX.   

Según los registros oficiales del Buró Federal de Prisiones (BOP) obtenidos por Business Insider, Ellison fue reubicada el pasado 16 de octubre de la Institución Correccional Federal de Danbury, en Connecticut. En la actualidad, la ejecutiva se encuentra bajo arresto domiciliario o en un centro de reinserción social. Continuará con la ejecución de su sentencia fuera de los muros de la prisión.   

La fecha proyectada para su liberación definitiva ha sido fijada para el 20 de febrero de 2026. Este cronograma representa una reducción de casi nueve meses respecto al término de su condena inicial. Cabe recordar que Ellison comenzó a cumplir su sentencia a principios de noviembre de 2024, luego de que el juez federal de distrito, Lewis Kaplan, dictara una pena de 24 meses de privación de libertad.   

Ellison cooperó con la justicia:

La colaboración estratégica con el Departamento de Justicia fue el factor determinante en la mitigación de su condena. En diciembre de 2022, Ellison se declaró culpable de múltiples cargos de conspiración, incluyendo fraude electrónico, lavado de activos, así como fraude de valores y materias primas. De no haber mediado un acuerdo, la suma de estos delitos conllevaba una sentencia máxima teórica de hasta 110 años de prisión.

Durante el proceso de sentencia, el juez Kaplan calificó la cooperación de Ellison con los fiscales federales como “sustancial” y de alto valor probatorio. No obstante, el magistrado subrayó que la gravedad y la escala del fraude financiero cometido hacían imperativa la imposición de tiempo efectivo en una institución penitenciaria.

En su comparecencia ante el tribunal en septiembre de 2024, Ellison expresó públicamente su arrepentimiento. De igual manera, reconoció el daño patrimonial masivo infligido a los clientes y a la comunidad de inversores. Su testimonio fue un pilar en la narrativa de la fiscalía para exponer las operaciones internas de las empresas vinculadas.

Los fiscales del caso describieron la declaración de Ellison como un elemento esencial en el juicio contra Sam Bankman-Fried. Las autoridades sostuvieron que el testimonio de ella sirvió para probar la estructura corporativa y la intencionalidad criminal. Si ello hubiese resultado difícil o hubiese sido un desafío significativamente mayor para el equipo legal del gobierno demostrar la culpabilidad de la cúpula.

La declaración de Caroline Ellison contra Sam Bankman-Fried fue determinante para el caso

Caroline Ellison desempeñó un papel determinante como testigo estrella durante el proceso penal contra Sam Bankman-Fried en octubre de 2023. A lo largo de tres jornadas de declaraciones consecutivas, la exdirectiva detalló con precisión cómo el antiguo consejero delegado de FTX instruyó a la alta dirección para ejecutar la malversación sistemática de los capitales. Fondos que provenían de los depósitos realizados por los usuarios del exchange.   

Según el testimonio presentado ante el tribunal, Bankman-Fried dictó órdenes directas para que Alameda Research desviara e invirtiera miles de millones de dólares pertenecientes a los clientes de FTX en diversas operaciones de riesgo. Para facilitar este flujo de capital, se implementaron configuraciones en los sistemas internos diseñadas específicamente para ocultar estas transferencias masivas del escrutinio público. De esta manera también las ocultaron de cualquier control auditor.   

Asimismo, Ellison profundizó en la naturaleza de su vínculo personal con el acusado, manifestando que frecuentemente se encontraba bajo una presión psicológica constante. Según sus declaraciones, terminó cediendo a las directrices de Bankman-Fried debido a la marcada asimetría de poder. Según ella, la influencia dominante que este ejercía dentro de la estructura jerárquica y la autoridad operativa de la organización fueron determinantes. 

El mapa judicial de la ex cúpula de FTX

Diversas resoluciones legales han marcado el destino de los antiguos miembros del comité ejecutivo de FTX. El ex CTO, Gary Wang, y el anterior director de ingeniería, Nishad Singh, han recibido sentencias que se limitan al tiempo ya cumplido bajo custodia. Las cuales están complementadas con periodos de libertad supervisada. Ambos exdirectivos desempeñaron un papel fundamental en la estrategia de la fiscalía al ofrecer una cooperación activa. Su declaración incluyó testimonios directos que resultaron incriminatorios para Bankman-Fried durante el proceso judicial.

En un contraste significativo, Ryan Salame, quien fuera director ejecutivo de FTX Digital Markets, se encuentra actualmente cumpliendo una condena de siete años de prisión en una instalación federal ubicada en Maryland. Salame se declaró culpable de cargos relacionados con violaciones a la financiación de campañas políticas. Además, asumió la gestión de un negocio de transmisión de fondos sin la debida licencia operativa. A diferencia de otros colaboradores, Salame rechazó los acuerdos de cooperación con el gobierno. Él ha manifestado públicamente su descontento ante lo que considera una excesiva lenidad otorgada a los testigos protegidos.

Por su parte, el fundador y figura central del colapso, Sam Bankman-Fried, purga una sentencia de 25 años de privación de libertad en una penitenciaría federal de California. Bankman-Fried fue condenado por la totalidad de los siete cargos de fraude y conspiración que enfrentaba. En la actualidad, su equipo de defensa mantiene en curso un recurso de apelación, fundamentado en la premisa de que el acusado no gozó de un juicio justo. Mientras su familia gestiona peticiones de clemencia presidencial, Bankman-Fried persiste en su tesis de que FTX nunca fue técnicamente insolvente. El ex CEO segura que el capital de los clientes podría haber sido devuelto en su totalidad.

Recuperación de capital y disputas sobre la solvencia de la plataforma:

Los acreedores de la extinta plataforma FTX continúan avanzando en el proceso de recepción de distribuciones de bancarrota. Las cuales derivan de una recuperación de activos que supera los $16.000 millones en capital gestionado. Por otro lado, un portavoz del Federal Bureau of Prisons ha declinado proporcionar información específica sobre las condiciones actuales de la transición de Caroline Ellison hacia el confinamiento comunitario. Fundamentan el silencio en protocolos de seguridad y derechos de privacidad. Asimismo, los asesores legales de Ellison no han emitido declaraciones ante las solicitudes de comentarios sobre su situación jurídica actual.

Este avance en la restitución de fondos ocurre en un contexto donde Sam Bankman-Fried ha reiterado su tesis de que FTX nunca estuvo en estado de insolvencia técnica. El fundador de la compañía ha señalado directamente a los equipos legales y a los administradores judiciales del proceso concursal como los principales responsables de lo que él califica como una destrucción masiva de valor corporativo. Estimando la pérdida de capitalización en más de $100.000 millones debido a la gestión de la quiebra.