La Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC) o Corporación Federal de Seguro de Depósitos de los Estados Unidos desaconsejó a un banco sobre utilizar blockchain públicas. Esto se pudo conocer gracias a documentos obtenidos por Coinbase. 

Esta advertencia se hizo mediante una misiva enviada al banco con el fin de evitar que este pudiera ofrecer a sus clientes servicios criptográficos. Todo parece indicar que la agencia federal busca disuadir a los bancos que pretenden incluir en sus servicios la adopción de redes blockchain públicas como Ethereum. 

Coinbase tuvo acceso a esta información gracias a una serie de correspondencias relacionadas con criptomonedas que no han sido censuradas y fueron enviadas a diferentes bancos miembros de la Corporación. Pero, ¿cómo llegó esta información a las manos de la plataforma de intercambio? Todo tiene que ver con la Ley de Libertad de Información (FOIA), la cual permite a cualquier ciudadano solicitar documentos clasificados o desclasificados de los Estados Unidos que sean de interés público. En total son 23 cartas las que recibió Coinbase. 

El proceso a recibir estas cartas requirió de una orden judicial. De esta manera se pudo revelar todo o casi todo el contenido de los documentos. En una de esas cartas, enviada desde la oficina de Nueva York de la FDIC a un banco miembro en 2022, detalla que la agencia se había enterado de que dicho banco pretendía ofrecer servicios con activos digitales

Específicamente, ese banco, estaba por ofrecer a sus clientes un servicio de “depósito digital bancario” diseñado para funcionar en una cadena de bloques pública. Cabe destacar que se mantuvo en secreto la blockchain escogida por el banco para dicho servicio. 

Te puede interesar: ¡Feliz Año Nuevo, 2025!

La FDIC de Estados Unidos busca disuadir sobre el uso de Ethereum o Solana

Si bien es cierto que en la carta la FDIC parece estar en desacuerdo con el uso de una cadena de bloques pública, censurada para el público, se puede inferir que pudieran ser Ethereum o Solana. Ambas blockchains están descentralizadas y no requieren permisos, lo que significa que la actividad en ellas es completamente pública. Por lo tanto, no pueden ser anuladas por “administradores humanos externos”

En cambio, como ya sabemos las redes de blockchain privadas, como las que usan cadenas de bloques privadas, como las que utilizan los estados nacionales para emitir monedas digitales de los bancos centrales, tienen como característica principal la imposición de límites. De esta manera pueden controlar quién puede usarlas y con qué propósito. Siguiendo esta premisa es lógico que la FDIC esté en desacuerdo con que los bancos utilicen cadenas de bloques públicas en lugar una red privada autorizada. 

La lectura que podemos dar de esto es que todavía las agencias federales de los Estados Unidos, reguladoras de la actividad económica, se manejan bajos preceptos de centralización financiera. En específico, a la FDIC no le gusta que los bancos miembros lancen productos en redes totalmente transparentes y en las que todo está permitido

Sin embargo, hay que destacar que estas cartas han sido enviadas en 2022, mucho ha pasado desde entonces y estamos a las puertas de un panorama político completamente distinto en este 2025. Agencias como la FDIC y la SEC regulan la actividad económica mediante la acción, sometiendo a las entidades bancarias a procesos detallados de revisión antes de lanzar productos vinculados a blockchains públicas

Te puede interesar: 2025: ¿Trump podría centralizar la Minería de Bitcoin?

La FDIC ordenó el cese de roda actividad relacionada con blockchains públicas 

En la correspondencia obtenida por Coinbase, se muestra como la FDIC ordenó a los bancos miembros que detuvieran la implementación de servicios relacionados con la compra y venta de Bitcoin. Además ordenó a los bancos miembros “pausar toda actividad relacionada con criptoactivos”

Paul Grewal, director jurídico de Coinbase, expresó que dichas cartas son una prueba más de cómo la administración de Biden buscaba frenar el avance de la industria criptográficas. Además relaciona esta medida con la “Operación Chokepoint 2.0”, ejecutada para regular la actividad bancaria. Estas cartas “muestran un esfuerzo coordinado para detener una amplia variedad de actividad criptográfica”, expresó Grewal.