En el cuarto día de su segundo mandato el presidente Donald Trump firmó su primera orden ejecutiva sobre criptomonedas. Ha establecido un grupo de trabajo para iniciativas del mercado criptográfico, además prohíbe la creación o el trabajo en una CBDC. Sin embargo, quedó por fuera el término o alguna mención a Bitcoin. 

El pasado jueves, el presidente de los Estados Unidos firmó esta orden ejecutiva relacionada con la industria criptográfica. El primer objetivo es establecer de manera formal un equipo o como ellos le han llamado Grupo de Trabajo Presidencial sobre Mercados de Activos Digitales. Ese grupo tiene como tarea primordial evaluar todas las promesas de campaña relacionadas con cripto activos. Como sabemos una de las grandes promesas es el establecimiento de una reserva nacional para Bitcoin.

Trump se apoyará en el grupo para asesorarse sobre temas relacionados con el mundo cripto. Con el fin de crear políticas que favorezcan a la industria y que sirvan de base para tomar decisiones en relación con la industria. El director del grupo será David Sacks, un capitalista de riesgo de Silicon Valley, apodado recientemente como “el zar de las criptomonedas y la inteligencia artificial” de la Casa Blanca. 

Otro encargado dentro del grupo será Bo Hines, ex candidato republicano al Congreso y ex jugador de fútbol universitario, este será quien supervise las operaciones diarias del grupo. Esta previsto que el grupo incluya la los nuevos jefes de la SEC y la CFTC, así como también al nuevo Secretario del Tesoro.

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Trump tendrá 20 consejeros sobre criptomonedas

El grupo o consejo presidencial sobre cripto activos estará compuesto de al menos 20 fundadores y directores ejecutivos de criptomonedas. Es muy probable que esos puestos los terminen ocupando grandes donantes de industria a la campaña de Trump.

Como dato relevante, podemos destacar que dicho grupo no tiene ninguna autoridad real más allá de la oportunidad de asesorar a Trump y al Congreso. Sin embargo, tanto el presidente como los miembros del congreso tendrán que tomar sus propias decisiones y estas no dependerán de dicho consejo. 

La orden ejecutiva ha sido titulada como: “Fortalecimiento del liderazgo estadounidense en tecnología financiera digital”. No sólo da origen al grupo de consejeros, también explora las posibilidades y allana el terreno para crear una “reserva estratégica nacional de activos digitales”.

La idea de un consejo de criptomonedas y de una reserva estratégica de BTC ha nacional ha sido impulsada desde el Senado a través de la Ley Bitcoin de la senadora Cynthia Lummis. También se han sumado varios estados que están considerando crear su propia reserva. Por cierto, la orden ejecutiva no menciona a Bitcoin por su nombre, tampoco menciona ningún otro criptoactivo específico. 

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Un ¡NO! rotundo a las CBDC

La orden ejecutiva viene a prohibir el lanzamiento de una moneda digital de banco centrales, o CBDC, aunque sus más duros defensores la llaman “dólar digital”. La idea de una criptomoneda centralizada ha sido ampliamente criticada y ridiculizada por los republicanos, alegando principalmente que sería una amplia vuolacion a la privacidad de los usuarios o ciudadanos. 

Orden Ejecutiva de Trump
Orden Ejecutiva de Trump

El grupo, bajo esta orden ejecutiva, tiene el imperioso objetivo de “proteger y promover los derechos de las empresas y los ciudadanos estadounidenses a realizar transacciones y auto custodiar criptomonedas”. Abre el camino para la libre extracción de criptomonedas, la validación de transacciones blockchain, y el lanzamiento de software blockchain.

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Lo que la comunidad espera

Para la comunidad esta primera orden ejecutiva puede abrir camino a otras más. Se esperan más órdenes de este tipo que permitan el libre desarrollo de la industria.

Sin embargo, lo más esperado y una prioridad es derogar la norma SAB 121 de la SEC. El Congreso derogó la SAB 121 la primavera pasada, pero el expresidente Joe Biden vetó la legislación dejando la norma en vigor que, entre otras cosas, desalienta a los bancos estadounidenses a tener criptomonedas.

Trump tiene en sus manos el poder de rescindir la SAB 121 con una orden ejecutiva. La comunidad espera esta acción ansiosamente. También se confía en que las órdenes ejecutivas del presidente permitan el fomento de las finanzas descentralizadas, y ordenar a las agencias federales, incluido el Departamento de Estado, que hagan del fomento de la innovación criptográfica una prioridad nacional.