La selección de Paul Atkins como nuevo presidente de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) ha sido recibida con mucho entusiasmo en la comunidad criptográfica. El ejecutivo se ha mostrado siempre como un defensor de los activos digitales y la innovación. Expresándose en varias ocasiones contra el enfoque de “regulación por aplicación” de la SEC dirigida por Gensler para la industria de las criptomonedas.
Desde que dejó la SEC en 2008 ha sido crítico con la comisión. En 2019 testificó ante el Congreso sobre la reestructuración de la Comisión, expresando que se debe propiciar un equilibrio entre la protección de los inversores y la reducción de las cargas regulatorias en las industrias emergentes.
¿Qué se espera de Atkins como presidente de la SEC?
Según declaraciones de Charlyn Ho, fundadora de Rikka Group, a un medio especializado, Atkins va a generar y propiciará “muchos cambios”. Sobre todo en la forma en que se regula la industria de las criptomonedas. Aunque advierte que no serán cambios inmediatos y tampoco sucederán todos a la vez. Esto frena el optimismo de una comunidad ávida de nuevas y mejores políticas regulatorias.
Ho sostiene que “es poco probable que Estados Unidos adopte un rumbo similar al de Europa. Por lo menos en lo que respecta a la introducción de un régimen regulatorio general como la Regulación de los Mercados de Criptoactivos (MiCA)”. Ella cree que Atkins viene a fomentar más que nada la orientación y eliminará, eso sí, algunos obstáculos regulatorios.
Me atrevería a decir que Trump y Atkins probablemente se opongan a crear nuevas regulaciones, sino que más bien a aumentar la claridad sobre dónde puede operar la industria de las criptomonedas.
Charlyn Ho, fundadora de Rikka Group.
La ejecutiva apuesta más a la labor legislativa del Congreso. Afirmando que hay numerosos proyectos de ley sobre criptomonedas que están siendo considerados, incluida la legislación sobre monedas estables y FIT 21. Con nuevas leyes se podrá crear un marco regulatorio para las criptomonedas. Muchas de estas leyes ya fueron aprobadas por la Cámara de Representantes. Los nuesvos textos legales pro-cripton esperan ser refrendadas por el presidente, que para el año que viene sería Donald Trump.
Si de algo estamos seguros, dice Ho, es que Atkins no va a seguir con el enfoque de su predecesor Gensler. El cual fue duramente criticado por la comunidad gracias a su postura demasiado agresiva y al rechazo permanente a la industria criptográfica. “Gensler aplicó una regulación por aplicación”, expresó Ho.
Nuevas leyes y rotación en la SEC
Ho sostiene que el mercado criptográfico necesita de un marco legal acorde a los nuevos tiempos y que también límite la actividad de la SEC. “Técnicamente, se supone que el Congreso debe aprobar leyes. Esas leyes delegan la autoridad a agencias ejecutivas como la SEC para que las interpreten. Pero se supone que sólo deben interpretarlas dentro de los parámetros que se les delegaron”, expresó. Agregando que la comisión ha sobrepasado sus límites al demandar a Coinbase y Ripple.
Cody Carbone, presidente de la Cámara Digital, espera que la nominación de Atkins se confirme en marzo. Todo deepende de qué tan rápido el Comité Bancario del Senado pueda procesar las nominaciones. Hay que tomar en cuenta que dicho comité debe procesar varias nominaciones para otros departamentos y agencias.
Volviendo a la nominación de Atkins, la Cámara de Representantes y el Senado pueden votar en contra de confirmar una nominación presidencial. Pero es muy poco probable que eso suceda. Sin embargo, recordemos que la nominación “no es un acuerdo cerrado”, explicó Carbone.
Es importante señalar que la SEC cuenta con una junta de cinco comisionados. La lista se distribuye en dos republicanos ( Peirce y Uyeda ) y tres demócratas ( Caroline Crenshaw , Gary Gensler y Jaime Lizarraga).
Una nueva SEC o una más repúblicana
Gensler y Lizarraga ya anunciaron su retiro en enero. Por su parte, el futuro de Crenshaw, una comisionada crítica de las criptomonedas que se opuso a la aprobación de los ETF de Bitcoin, está en limbo. En su caso se ha pospuesto indefinidamente su votación de re-nominación.
Está previsto que en 2025 la SEC tenga mayoría republicana de tres miembros bajo la nueva administración tras la investidura de Trump. Incluso se especula con la posibilidad de que el nuevo presidente de los Estados Unidos rompa el protocolo y nombre a un cuarto comisionado republicano para reemplazar a Lizarraga.
El mandato de Atkins no traerá cambios de inmediato
Si observamos la postura del posible nuevo presidente de la SEC, podemos afirmar que su mandato será completamente distinto al del actual jefe de la Comisión. En 2023, durante un entrevista en el podcast “Free The People”, Atkins expresó que “si la SEC hubiera sido menos combativa, habría habido más oportunidades para el crecimiento de la industria en los Estados Unidos”.
Si la agencia hubiera sido más complaciente y tratará directamente con estas diversas empresas, creo que sería mucho mejor que las cosas sucedieran aquí en los Estados Unidos en lugar de afuera.
Paul Atkins, nominado para presidente de la SEC por Donald Trump.
Aunque el posible “nuevo presidente de la SEC” es claramente pro-criptomonedas, Charlyn Ho advierte que “la revisión no será rápida. Aunque las reglas podrían estar adelantándose”.
“Gensler todavía tiene un precedente que debe seguir y solo porque se nombre un nuevo comisionado no significa que todo el trabajo legal y los precedentes que surgieron anteriormente desaparezcan”.
Charlyn Ho, fundadora de Rikka Group.
Ho sostiene que si verdaderamente Atkins quiere cambiar la postura de la SEC, no podrá hacerlo de inmediato. Cada decisión debe ser revisada por un proceso legal y tener alguna justificación para tomarlas. “Todavía estaría limitado por ciertas cosas”, recalcó Ho.