Elon Musk y su empresa Tesla han logrado evitar la demanda vinculada con Dogecoin. Un juez ha desestimado y desechado tanto la demanda como el caso que pretendía cobrarle al magnate y su empresa al menos 250.000 millones de dólares en compensación. 

El grupo de abogados que representan a los “inversores agraviados y descontentos” afirma que a pesar de este fallo seguirán luchando en la siguiente instancia judicial. En los próximos días presentarán un documento de apelación ante el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito.

Este caso ha sido desestimado por un juez federal que estableció que ni Tesla, ni su fundador Elon Musk, tenían algo que ver con una supuesta manipulación del mercado a través del elogio público de Dogecoin. Los agraviados, quienes sostienen que el magnate ha influido para la inversión masiva en DOGE, exigen que les compense con 258.000 millones de dólares.

Los supuestos afectados que se han asociado para la demanda afirman haber perdido enormes cantidades de dinero debido los comentarios en las redes sociales de Musk sobre la memecoin DOGE. En un principio habían solicitado 86.000 millones de dólares en daños y perjuicios. Luego exigieron una “triple indemnización”, elevando el monto a 258.000 millones de dólares.

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Elon Musk y Tesla demandados 

El grupo de demandantes ha ido contra Musk por una serie de las diversas declaraciones públicas sobre Dogecoin. Todo comenzó cuando el magnate recurrió a su cuenta en Twitter, ahora X, entre 2021 y 2023. Se argumenta que sus declaraciones lograron engañar a muchos inversores que han tenido, seguro sus relatos, importantes pérdidas financieras.

Estas declaraciones son meras aspiraciones y exageraciones, no son reales y pueden ser falsificadas. No pueden servir de base a una demanda y ningún inversor razonable podría confiar en ellas.

Alvin K. Hellerstein, juez de distrito estadounidense.

La demanda fue presentada en junio de 2022. Durante el proceso judicial se ha modificado cuatro veces. La última actualización se hizo en 2023 para agregar una acusación de uso de información privilegiada. Los abogados representantes de los demandantes han acusado también al equipo jurídico de Tesla de acoso. Esto último ha sido calificado por el juez como “una afirmación infundada y audaz”.

El juez, que ha incluido en su fallo que los argumentos de los inversores descontentos no estaban claros. “No es posible entender las acusaciones que forman la base de la conclusión de los demandantes sobre manipulación del mercado, un esquema de “pump and dump”, un incumplimiento de un deber fiduciario equivalente a tráfico de información privilegiada, o las reclamaciones de la ley estatal”, afirmó. 

Por su parte, los demandantes afirman que “vivimos en un mundo en el que las personas más ricas, como Elon Musk, hacen lo que quieren y se salen con la suya”. Y los abogados de estos sostienen que “el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito ha tenido el coraje de fallar en contra de Musk antes. Ahí es donde recibiremos justicia en este caso”.