Como era de esperarse, Joe Biden, presidente de los Estados Unidos, rechaza el proyecto de ley contra el SAB 121. El mismo fue propuesto por Representantes republicanos para frenar el ímpetu regulatorio y excesivo de la comisión SEC

La también llamada Ley de Innovación Financiera y Tecnología para el Siglo XXI, o FIT21, busca establecer una nueva estructura del mercado de criptomonedas. El proyecto aún no se ha votado en la cámara, está previsto que se haga en esta semana. 

Es importante señalar que Biden no amenazó con vetar la ley si se llegase a aprobar. Esto podría indicar que habrá algún cambio para la administración en cuanto a la industria criptográfica. 

El primer mandatario norteamericano y su encargado en la SEC han mostrado su rechazo a este proyecto de ley. Gary Gensñer afirma que “promulgar nuevas normas para regular las criptomonedas podría socavar la solidez de los mercados de capitales de Estados Unidos y dejar a los inversores en la oscuridad en cuanto a las revelaciones que merecen”

Desde la Casa Blanca afirman que se oponen al proyecto de ley FIT21 “porque carece de protecciones suficientes para los consumidores e inversores que participan en transacciones con criptomonedas”.

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Biden y Gary Gensler rechazan nuevas reglas de apertura criptográfica

Tanto la Casa Blanca, como Gary Gensler en calidad de presidente del ente regulador de valores, han advertido que nuevas normas para criptomonedas podrían debilitar los mercados de capitales. Gensler expresó preocupación por la capacidad de la SEC para supervisar adecuadamente si se aprueba FIT21.

De igual manera, Biden ha dicho en declaraciones anteriores que podría vetar cualquier ley o proyecto de ella que cambie, restrinja o elimine las reglas de la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) sobre la custodia de criptomonedas para los bancos. 

Sin embargo, aún no hay un comunicado oficial de veto o de intención de veto sobre la aprobación de la medida que pretende derogar el Boletín de Contabilidad del Personal (SAB) 121 de la SEC. El proyecto debe pasar por ambas cámaras, de Representantes y el Senado, antes de que el presidente puede ejercer alguna acción de veto.