El CryptoPunk #8611 que se vendió por 55 Ethereum o $95,000 fue quemado a pocas horas después. El NFT se quemó bajo la inscripción 12 456 749. Esto indica que ahora es un activo similar al NFT pero en la blockchain de Bitcoin. Los aficionados ya dicen que es una nueva manera de resucitar los criptoactivos quemados. 

Cabe destacar que esté costoso NFT, originalmente acuñado en la red de Ethereum, pertenece a una de las colecciones de PFP más preeminentes de la Web3. Al “eliminarlo” se sacó de circulación y ahora se vinculó de manera simbólica a una inscripción en la nueva plataforma Ordinals. Los Bitcoiners ya celebran el costoso y llamativo esfuerzo.

Un portavoz de los “Bitcoin Bandits” expresó que “la comunidad apoyó la idea como loca”. Al menos unas 150 contribuyeron a la causa, según sus propias palabras. También expresó que la decisión de destruir efectivamente el CryptoPunk #8611 fue un esfuerzo liderado por la comunidad y llevado a cabo por el desarrollador de “Wolf Capital Nathan Stein”.

Cabe destacar que los “Bitcoin Bandits” son una colección de inscripciones de Ordinals de temática occidental. También vale la pena señalar que cuando se quema un activo digital, se lo encierra por la eternidad en una billetera digital que nadie controla. La wallet donde está alojado ahora el CryptoPunk #8611 contiene al menos $21 millones en Ethereum.

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El CryptoPunk #8611 no se quemó por entretenimiento

Esta “nueva modalidad” de quemar NFTs inició en febrero de este año. Cuando Jason Williams quemó un NFT de la colección Bored Ape Yacht Club con un valor de alrededor de $169.000 en ese momento. William dijo en esa oportunidad que “arrojar un Lamborghini en un compactador de basura” es algo divertido.

Por su parte, Yuga Labs, creadores del Bored Ape Yacht Club, le dijeron a lo medios que la inscripción de Ordinals vinculada al BAYC NFT de Williams representa un simio ilegítimo. Pues solo los tokens que provienen del contrato inteligente original del proyecto se consideran válidos. Esto le otorga a los titulares derechos comerciales y accesos privilegiados a eventos.

Sin embargo, lo que diferencia esta acción de la de Williams, es que el CryptoPunk #8611 no quemó por mero entretenimiento. Así lo afirma “Wolf Capital Nathan Stein”, quien además explica que al crear o “inscribir” activos similares a NFT en Bitcoin se crean satoshi individuales. Los datos allí acuñados pueden ser imágenes, videos o incluso texto sin formato, y con ello se generan los tokens BRC-20.